Con una formidable vista del lago Argentino, el centro intentará romper la estacionalidad turística e imponer el destino en invierno. El Parque comenzó a construirse en 2002, el invierno último abrió la confitería y desde hoy, con la inauguración oficial, ya tendrá la aerosilla en marcha. Para julio está prevista la apertura definitiva de las pistas.
Llegar hasta el centro implica alejarse apenas 11 kilómetros del centro de El Calafate, localidad que vive por estos días el vértigo del crecimiento inmobiliario. Al sur del lago, sobre la cadena montañosa Huyliche, se encuentra la Olla del Chingue, una suerte de cañadón en la montaña que durante el invierno se transforma en un recolector natural de nieve.
Este capricho de la naturaleza, sin árboles y con distintos niveles de altitud, fue el lugar elegido para que inversores privados con la asistencia del municipio local se animaran a emprender uno de los centros de esquí más australes del país.
La extensión total del circuito es de tres mil metros y cuenta, por ahora, con dos pistas de dificultad intermedia, una más difícil y otra destinada al esquí extremo. Para el futuro se estima que sobre la meseta del Huyliche se podrá practicar también esquí de fondo partiendo desde el centro.
Según explicó el empresario Horacio Junco, la tecnología por inaugurar es similar a la que se utiliza en Las Leñas, Mendoza, y Cerro Catedral, en Río Negro. «El sistema de seguridad especialmente diseñado para esta aerosilla, llamado VIGI 300 versión 2006, se basa en una plataforma de vigilancia en tiempo real que monitorea en forma constante el paso de las sillas y el cable de acero sobre las doce poleas en cada una de las torres», detallan desde la empresa.
El moderno sistema también verifica constantemente el impacto del viento. Tanto, que ante una velocidad o ráfagas de 60 km por hora el sistema automáticamente reduce la velocidad a la mitad, y a los 80, el sistema ejecuta un protocolo de liberación que consiste en detener la silla y evacuar a velocidad reducida.
Por eso la aerosilla será mejor y más operable en días que la velocidad del viento sea inferior a los 60 km por hora, es decir, en gran parte de la estación invernal.
El Parque de Nieve propondrá un conjunto de actividades de invierno en el cual se conjugarán la vista sin parangón del lago Argentino, las cálidas instalaciones de la confitería y restaurante Brasero, y las pistas de esquí.
Fuente: lanacion.com.ar
